Llevo una temporada desaparecida, lo sé. Siempre prometo actualizar el blog, las redes sociales… y luego siempre no lo hago porque me surge alguna cosa. Ha sido un mes de no parar. Estoy de exámenes, haciendo un curso para sacarme un certificado de seguridad alimentaria, haciendo entrevistas de trabajo (porque de algo tengo que vivir y poder publicar mis libros).

Y también de jardinería. En mi Instagram voy subiendo fotos de mis plantas y he estado bastante ocupada pasando las plantas de unas macetas a otras, controlando la plaga de orugas que tengo… Y planeando los siguientes libros después de Destino de hada porque estoy escribiendo el último libro de Abby.

Para los que os apuntasteis a la lectura conjunta organizada por Devoradores de mundos, ayer empezó la segunda parte. Podéis revisar las bases en mi web o en el blog de Devoradores de mundos.

De Destino de hada os puedo decir que ya llevo unos cuantos capítulos escritos pero todavía no he llegado a un tercio. Va a ser en un principio el libro más largo con diferencia. Quiero dejarlo todo bien atado porque, como ya he dicho en anteriores ocasiones, es el último libro de Abby. No de Cenystel ni de Adarathiel pero la historia de Abby termina con el tercer libro. Hay otros personajes que esperan su turno.

Siguiendo con la temática, ya que Destino de hada se centra en la magia de la tierra, ahora estoy escribiendo sobre un nuevo reino ya introducido brevemente en Maldición de hada. Y hasta aquí os cuento. Hasta la próxima entrada